Buenas tardes, hoy os vengo a contar un poquito más nuestra primera experiencia viajando con gato en avión, que espero que os ayude si estáis pensando cómo es esto de volar con gatos, resolveros vuestras dudas y miedos que nosotros tuvimos antes de hacerlo. Pero no os preocupéis porque es más fácil de lo que parece!
Pensar en volar con vuestra mascota puede ser por muchos motivos, los más comunes, vacaciones o cambio de residencia por el motivo que sea, en nuestro caso era el segundo y sopesamos varias posibilidades. Yo os voy a hablar de un vuelo interno de España, por lo que depende de a donde queráis volar, tenéis que revisar la normativa del país a donde viajéis y restricciones para evitar problemas.
Nuestro viaje era a una isla, por lo que solamente teníamos dos opciones: Ferry o avión. El ferry lo descartamos totalmente por la cantidad de horas que eran desde Zaragoza a Barcelona, Valencia o Denia que es de donde salían los ferrys, más el tiempo del ferry. En un principio pensé, lo llevamos en ferry, cogemos camarote y mientras dura la travesía Cocholate puede estar en una habitación con nosotros, pero eso no es posible ya que los animales van en una zona apartada en Jaulas que te proporcionan o tu propio transportin pudiendo ir a verlos un par de veces, pero no pueden estar contigo físicamente todo el trayecto, por lo que lo desechamos. Si fuera un perro, seguramente hubiera sido más fácil, ya que puedes ir a verlo, lo sacas un poco por la cubierta, pero a un gato… si encima que lo sacas de su casa, pretendes que salga de su transportín un rato y luego volver a meterlo… creo que no sería fácil.
Preparativos para viajar en avión con tu gato:
1- Compañías aéreas:
Lo primero fue informarnos que compañías aéreas con salida desde nuestra ciudad permitían viajar con mascota y que pudieran ir en cabina. Desde Zaragoza las compañías que aceptan mascotas son Air Europa, Vueling y Volotea pagando un suplemento (como si fuera su billete). Por ejemplo, Ryanair, no acepta mascotas ni en cabina ni en bodega.
2- Papeles y pasaporte en regla:
Tu gato tiene que tener el Pasaporte Europeo (si, igual que nosotros), que es un documento en el que aparecen todos los datos de tu mascota como propietario, descripción del animal, si tiene chip la fecha y donde está ubicado, vacunas y tratamientos etc… como nuestra cartilla de vacunación de cuando éramos pequeños 🙂 Esta cartilla te la hará tu veterinario, a nosotros nos la dieron cuando adoptamos a Cocholate con todo sus datos desde que nació.
3- Que lleve Chip:
Muy importante y obligatorio que vuestro gato lleve chip. Cuando adoptamos a Cocholate, ya venía con chip que le habían puesto sus antiguos dueños por lo que si estáis pensando en viajar con vuestra mascota es indispensable. Por ejemplo, nuestra antigua gata que le regalaron a Dani cuando era pequeño, no llevaba chip y si hubiéramos querido viajar en avión con ella, tendríamos que habérselo puesto.
Cuando cambiamos los datos del anterior dueño a los nuestros, recibimos del Gobierno de Aragón una tarjeta, por así decirlo… el DNI de Cocholate con todos sus datos
4- Vacunas al día:
Otro punto importante es tener las vacunas al día, si no, no te dejaran volar ya que revisan la cartilla gatuna en el aeropuerto.
5- Vacuna de la Rabia:
Esta vacuna, también es obligatoria, nosotros no lo sabíamos y casi no nos dejan volar. En cuanto podamos se la vamos a poner para evitar problemas.
Antes de volar llamé a la compañía aérea, al ayuntamiento de la nueva ciudad… y solamente me decían que vacunas al día, pero nadie comentó lo de la rabia, ahora ya lo sabemos y es obligatoria.
Aeropuerto y vuelo:
Nosotros queríamos que Cocholate viajara con nosotros en cabina, porque iban a ser muchos cambios, es muy asustica y no queríamos meterla en bodega, además de que no me gusta la idea.
1- Billetes:
Una vez que sabíamos con qué compañías volar, compramos los billetes. En algunas compañías, puedes contratarlo directamente desde su web, en otras hay que llamar y comprar los billetes vía telefónicamente ya que comprueban si hay sitio libre en el vuelo porque la mayoría solamente dejan 2 mascotas por vuelo. Vueling por ejemplo sí que deja cogerlo desde su propia web, pero Air Europa no, y tienes que llamar. Además, me cobraron 6€ por persona de gastos de gestión que no me gustó mucho ya que me obligaron a llamar porque desde su web no se puede coger el viaje de mascota. El billete de gato para Península y Baleares cuesta 25€ en Air Europa.
2- Transportín:
Para que una mascota pueda viajar contigo en cabina (en las compañías que transportan mascotas) tiene que ir en su propio transportín de unas medidas máximas 55 x 35 x 25 cm y un peso máximo de la mascota + transportín de 8 kg. De todas formas, revisar siempre la información de viaje con mascotas en cada compañía ya que puede variar. Os dejo las normas de Air Europa.
3- Relajar a la gata:
Como Cocholate no estaba acostumbrada a viajar, nos recomendaron en la veterinaria que le diéramos una pastillita unas horas antes para relajarla y adormilarla un poco y evitar que sufriera con el vuelo, ruidos, mucha gente, cambios… a eso había que sumarle lo poco que le gusta entrar al transportin. Unos días antes la montamos en el coche varias veces para desplazamientos cortos o recados en el que uno se quedara en el coche con ella y el otro hacia las cosas para así ir acostumbrándola a que no pasa nada por ir en transportín y que no siempre es ir al veterinario.
4- Preparativos antes del viaje:
Hay que evitar que coma y beba mucho unas horas antes del viaje, ya que va a estar en el transportin durante unas horas y no va a tener sitio donde hacer sus necesidades, además nosotros, como le dimos la pastilla para adormilarla, así también evitamos que pudiera vomitar. La verdad es que nos dijeron que le duraría unas 8h, pero tardó en hacerle efecto bastante, más de una hora, y luego enseguida se fue despertando, pero cada gato es un mundo.
5- Check-in:
Una vez en el aeropuerto, fuimos a ventanilla a hacer el check-in ya que, al llevar mascota, no se podía hacer online. Ahí nos revisaron el pasaporte, papeles y vacunas de la gata.
6- Pasar por seguridad:
Y aquí viene el momento más importante del viaje, pasar el arco de seguridad con la gata encima y el transportin por la cinta escaneadora. Este también fue uno de los motivos de adormilarla, ya que sacar a un gato en un aeropuerto, rodeado de mucha gente y cruzar los dedos para que no se escape es todo un reto. La verdad que como iba un poco dormida (cuando vamos al veterinario y eso no se despega de nosotros o del transportín), fue más fácil de lo esperado, se pegó a Dani como si no hubiera un mañana y no fue muy difícil meterla de nuevo al transportin… Una buena idea (que igual probamos) es comprarle un arnés por si acaso saliera corriendo evitar perderla ya que un perro está mucho más acostumbrado a salir a pasear etc. y a mi parecer sería más fácil.
Nos dijeron, que en algunas ciudades hay una sala para pasar la zona de seguridad que solamente estas tu con el gato y el de seguridad por lo que si se escapa o algo es en una sola habitación y es más fácil, pero en Zaragoza no, así que cruzamos dedos y suerte para que salga todo bien.
7- Avión:
En el avión, ningún problema, como si llevásemos una mochila o maleta más. La pones entre tus piernas y listo.
Al ser la primera vez que viajábamos en avión con la gata, teníamos muchas dudas, nervios, pero todo salió genial, por lo que en el próximo vuelo igual probamos a volar sin dormirla poniéndole arnés, ya os contaré.
Espero que os haya ayudado si estáis pensando en cómo viajar con un gato en avión y si tenéis alguna duda, para eso estamos!
Me ha encantado tu post. Estoy organizando preparativos para un vuelo con mi gato con Air Europa y no logro encontrar transportines con esas medidas… Me podrías decir cual usaste tú y dónde lo compraste?/Muchas gracias
Hola, me alegro que te sea útil! Mi transportin era el típico con forma de media luna, y asas arriba (creo que lo compramos en un chino hace mil años, porque era ya de la otra gata), se nos ha roto y hemos comprado uno de trixie que es también mochila y puedes llevarlo a la espalda pero todavía no lo hemos usado en el avión. El nuestro pasaba un par de cm por uno de los lados pero nadie nos dijo nada ni nos lo midieron,además era un poco flexible, no muy rígido y me cabía entre las piernas. ¿Has mirado en zooplus? Si quieres envíame una foto del que tienes y te digo si se parece al que llevamos nosotros, que se nos rompió y no puedo hacerte foto ahora. Gracias 🙂